Manualidades para huerto infantil: una actividad educativa y divertida

 

Las manualidades relacionadas con el huerto infantil son actividades que combinan aprendizaje y diversión. Estas experiencias permiten a los niños explorar la naturaleza mientras desarrollan habilidades importantes. A través de la jardinería, los pequeños aprenden sobre el cuidado de las plantas y la importancia de una alimentación saludable. Además, las manualidades ofrecen numerosas oportunidades para potenciar su creatividad y responsabilidad.

¿Qué es la jardinería para niños?

La jardinería para niños es una actividad práctica que permite a los más pequeños interactuar con la naturaleza. A través de la siembra y el cuidado de plantas, los niños pueden aprender sobre el crecimiento de los vegetales, así como desarrollar habilidades importantes mientras se divierten.

Beneficios de la jardinería para niños

La jardinería y los huertos infantiles son mucho más que simples actividades de educación ambiental; son herramientas pedagógicas ricas en experiencias sensoriales y aprendizaje. A continuación, te explico cómo la jardinería beneficia a los niños:

1. Experiencia sensorial completa

El huerto infantil es un espacio donde los niños pueden experimentar con sus cinco sentidos:

• Tacto: Manipulan la tierra y riegan las plantas.
• Olfato: Olor de flores y hierbas aromáticas.
• Vista: Observar colores vivos de flores, plantas e insectos.
• Oído: Escuchar el zumbido de insectos y el trino de los pájaros.
• Gusto: Disfrutar de las frutas y hortalizas cultivadas.

2. Desarrollo de la motricidad y orientación

A través de las actividades del huerto, los niños desarrollan habilidades importantes como:

• Motricidad fina: Manipulación de herramientas, semillas y plantas.
• Orientación espaciotemporal: Comprender el espacio y los ciclos de las plantas.

3. Exploración y aprendizaje interdisciplinario

El huerto permite que los niños:

• Observación de seres vivos: Detectar el ciclo de vida de insectos y plantas.
• Interrelación de conceptos: Integrar conocimientos de ciencias naturales, matemáticas y lenguaje.

4. Fomento de habilidades sociales y trabajo en equipo

En el huerto, se promueve:

• Socialización: Los niños colaboran entre ellos, creando lazos y fomentando el trabajo cooperativo.
• Organización y respeto: Respetar los turnos y participar en la planificación de tareas.

5. Desarrollo cognitivo y emocional

Finalmente, la jardinería ayuda a fortalecer capacidades esenciales en los niños:

• Atención y percepción: Estar atentos a los detalles y cambios en el entorno.
• Memoria y motivación: Recordar tareas y mantenerse motivados durante el proceso.

Estas habilidades son la base de cualquier aprendizaje futuro y resultan fundamentales en el desarrollo infantil. El huerto escolar no solo es un espacio para aprender, sino también para crecer como individuos y como parte de una comunidad.

Creando un mini huerto en casa

Crear un minihuerto en casa es una excelente forma de cultivar tus propias verduras y frutas frescas. Aquí explicamos cómo hacerlo, paso a paso:

Paso a paso para iniciar un mini huerto

Preparación del recipiente

El primer paso consiste en seleccionar un recipiente adecuado. Este puede ser una maceta, una caja de madera o incluso un recipiente reciclado. Es fundamental que el recipiente tenga agujeros de drenaje en la base para evitar que el agua se acumule y ahogue las raíces de las plantas. Antes de comenzar, asegúrese de limpiar bien el recipiente para eliminar cualquier residuo.

Adición del sustrato

Una vez preparado el recipiente, se procede a añadir el sustrato. Este debe ser ligero, poroso y nutritivo. Una mezcla de humus de lombriz, fibra de coco y compost es ideal para proporcionar los nutrientes necesarios. Se recomienda que la capa de sustrato tenga al menos 10 centímetros de profundidad para permitir un buen desarrollo de las raíces.

Siembra de las semillas

Con el sustrato listo, se pueden sembrar las semillas. Hacer surcos en el sustrato con un rastrillo facilitará la siembra. Es importante seguir las instrucciones que vienen en el paquete de cada tipo de semilla, ya que indican la cantidad adecuada a plantarse. Para aquellos que prefieran una opción más rápida, se pueden utilizar plántulas ya germinadas.

Riego adecuado

El riego es esencial para el crecimiento de las plantas. Se debe prestar atención a las necesidades específicas de cada tipo de planta para evitar el exceso o la falta de agua. Un riego moderado, que mantenga el sustrato húmedo sin encharcamientos, garantizará un desarrollo saludable de las plantas.

Mantener y observar

Una parte crucial de la experiencia es el mantenimiento y la observación del huerto. Es importante dedicar tiempo a cuidar las plantas, regarlas regularmente y estar atentos a cualquier cambio en su crecimiento. Este seguimiento permitirá a los niños aprender sobre el ciclo de vida de las plantas y el impacto de sus cuidados. También se puede fomentar la toma de notas para registrar el crecimiento de las plantas, lo que añade un componente educativo adicional a la actividad.

Ideas de manualidades para un huerto infantil

A continuación te compartimos algunas ideas de manualidades que hemos realizado en BRAINS NURSERY SCHOOLS para empezar a trabajar el huerto infantil en este nuevo curso. Estas actividades no solo son divertidas, sino que también ayudan a los niños a aprender sobre el cuidado de las plantas y la naturaleza.

1. Etiquetas – Marcadores para plantas

¿Qué necesitamos?

• Cartulinas o cualquier tipo de papel resistente.
• Rotuladores o lápices de colores.
• Palos de madera (como los de manualidades o helados).
• Tijeras y pegamento.

Instrucciones:

Esta actividad consiste en crear cartelitos para clasificar las hortalizas y verduras del huerto. Los niños pueden escribir los nombres de las plantas, dibujar sus formas o incluso pegar recortes de revistas. Luego, pegaremos el cartel en un palo y lo clavaremos en la tierra. Así, podrán identificar de forma visual qué está plantado en cada lugar del huerto.

2. Decoración con animales y frutos de temporada

¿Qué necesitamos?

• Láminas para colorear con dibujos de animales y frutos de la temporada.
• Colores, ceras o rotuladores.
• Tijeras.
• Pegamento

Instrucciones:

Para decorar el huerto, los niños colorearán animales y frutos típicos de la estación en la que se realice la actividad (por ejemplo, manzanas en otoño o mariposas en primavera). Dependiendo de la edad, pueden también recortarlos. Una vez listos, los dibujos servirán para adornar las paredes y jardineras del huerto, creando un ambiente acorde con la temporada.

3. Espantapájaros casero

¿Qué necesitamos?

• Ropa vieja o disfraces.
• Material de decoración: telas, paja, botones, trozos de tela de colores, etc.
• Cabeza del espantapájaros: se puede usar un brick de leche decorado, un balón de goma espuma o un dibujo plastificado.
• Sombrero para darle el toque final.

Instrucciones:

El primer paso es elegir el estilo del espantapájaros: ¿queremos que sea divertido o más tradicional? Seleccionamos ropa que haya quedado pequeña o que podamos decorar con diferentes materiales. Para la cabeza, puedes hacer un dibujo en cartulina o reutilizar un objeto, como un balón o un brick de leche. Decora el espantapájaros con paja, telas y materiales reciclados. Finalmente, coloca un sombrero para darle un aspecto auténtico de granjero.

4. Decoración de macetas

¿Qué necesitamos?

• Macetas (compradas o hechas con materiales reciclados como botellas o bricks de leche).
• Rotuladores, pegatinas, pintura, goma eva.

Instrucciones:

Las macetas son como las casitas de las plantas, ¡así que deben verse bonitas! Los niños pueden decorar las macetas con rotuladores, pegatinas o pinturas. Pueden dibujar caras sonrientes, frutas, animales, o cualquier otro diseño que deseen. También pueden utilizar goma eva para crear formas divertidas, letras o personajes. Si decides hacer las macetas con materiales reciclados, como botellas de plástico, esta actividad se convierte en una lección de reciclaje y sostenibilidad.

Elección de plantas fáciles de cultivar en un huerto infantil

Al iniciar un huerto, es importante seleccionar plantas que sean sencillas de cultivar y que se adapten bien al entorno. Elegir las especies adecuadas facilita el éxito y motiva a los niños a participar en el cuidado de su huerto.

Variedades de plantas recomendadas

• Rábanos: Crecen rápidamente y son ideales para principiantes, ya que su cosecha se puede realizar en pocas semanas.
• Lechugas: Existen muchas variedades y su crecimiento es rápido. Se pueden recolectar periódicamente, lo que mantiene el interés de los niños.
• Tomates cherry: Perfectos para cultivar en macetas o en el suelo. Proporcionan frutos dulces y son fáciles de cuidar.
• Fresas: Estas plantas son muy populares entre los niños por su sabor y color atractivo, y requieren un cuidado básico.

Plantas aromáticas y hortalizas

• Albahaca: Es sencilla de cultivar y su aroma es muy agradable. Ideal para introducir a los niños en el mundo de las hierbas.
• Perejil: Esta planta se adapta bien y puede usarse para cocinar. Es una buena forma de enseñar a los niños sobre la gastronomía.
• Cilantro: Otra planta aromática fácil de cultivar, poco amante del calor. Se puede cultivar tanto en interior como en exterior. En exterior agradece semisombra, pero en interior requiere sol directo. Mantén el sustrato siempre húmedo.

Herramientas de huerto para niños

El uso de herramientas adecuadas para el tamaño y la seguridad de los niños es clave para que disfruten de la experiencia en el huerto. A continuación, te presento algunas herramientas que son perfectas para que los más pequeños puedan participar en el cuidado de las plantas de manera segura y efectiva:

• Palas pequeñas
• Rastrillos infantiles
• Guantes de jardinería
• Cestas o cubos pequeños
• Azada
• Regaderas
• Tijeras de jardinería seguras

Conclusión

El huerto infantil es mucho más que una actividad recreativa, es una herramienta educativa que potencia el aprendizaje sensorial, el desarrollo motor y el trabajo en equipo. Al crear un huerto infantil en casa o en la escuela, los niños aprenden a cuidar la naturaleza, observan el crecimiento de las plantas y fortalecen su conexión con el entorno. Esta experiencia no solo les enseña sobre el medio ambiente, sino que también cultiva valores como la responsabilidad, la paciencia y el respeto por la vida vegetal.