Combatiendo el acoso escolar: Una llamada a la acción contra el bullying

¿Qué es el bullying o acoso escolar?

El acoso escolar o bullying es la agresión que sufre un niño/a. Esta agresión se da de varias formas, pero siempre son amenazas hostiles que se repiten intencionadamente por parte de otro niño/a o de un grupo de ellos, hacia él” acosado” normalmente cuando acude al colegio.

 El “acosador” aprovecha la desigualdad existente entre él y “su acosado” para conseguir un beneficio, bien sea material o no, mientras que el acosado se siente indefenso y desarrolla una serie de trastornos psicológicos que afectan directamente a su salud o incluso, en situaciones extremas tienen conductas autodestructivas.

Día internacional contra el bullying o el acoso escolar

El 2 de mayo se celebra el Día Internacional contra el Bullying o el Acoso Escolar, el objetivo de este día es el de concienciar sobre el riesgo real del acoso escolar y el bullying en los colegios entre niños y jóvenes. También el de intentar evitarlo, puesto que hoy en día se ha convertido en un peligro real para la población infantil y juvenil.

Esta fecha fue establecida por diferentes asociaciones de padres y organizaciones no gubernamentales para informar y concienciar a la población sobre los riesgos del acoso escolar y los métodos para evitarlo en los centros escolares. La causa se representa con un lazo de color púrpura.

¿Cuáles son los 5 tipos de acoso escolar o bullying?

Cuando hablamos de acoso escolar o bullying en la escuela, hablamos de situaciones de desigualdad entre los compañeros, que normalmente se producen durante el recreo, en la fila para entrar a clase, en los baños, los pasillos, los cambios de clase, al entrar y salir del centro, en el transporte escolar o en el comedor. También puede ocurrir dentro del aula, pero este último caso es menos probable, puesto que está más presente la figura del profesor.

Los “agresores” saben muy bien donde hacerlo a escondidas de los adultos.  También se sabe que cuanto mayor es el centro escolar, mayor riesgo de acoso puede existir. 

El acoso escolar o bullying puede presentarse de varias maneras:

• Acoso verbal: Consiste en insultar, amenazar, chantajear, poner motes, o provocar a otro niño.
• Acoso físico: El acosador golpea, empuja o utiliza algún instrumento para hacer daño físico a su víctima. 
• Acoso social: Este tipo de bullying se produce cuando el acosador decide ignorar, difundir rumores, convencer a otros niños para que no hablen con él, esconden sus cosas….
• Acoso sexual: Son todas las acciones que tienen connotaciones sexuales: tocamientos no consentidos o que se burlan de la orientación sexual de la víctima.
•  Ciberbullying: Es un tipo de acoso escolar donde el acosador a través de móviles, tablets, ordenadores, etc. Difunde mensajes, imágenes o vídeos desagradables o que hacen daño a la persona acosada, así como rumores a través del email o en las redes sociales.

Este tipo de acoso está aumentando en los últimos años. Además, pueden suceder 24 horas al día y 7 días a la semana.

¿Qué podemos hacer para prevenir el bullying o acoso escolar? 

El Bullying hay que prevenirlo desde edades tempranas y trabajarlo conjuntamente desde casa y desde el colegio.

Desde casa:

La base principal de cariño y educación de los niños es la familia. En ella aprenden a socializarse respetando valores, normas y comportamientos que han aprendido en el hogar. Por ello hay que evitar que la casa se convierta en un lugar violento u hostil.

Es tarea de los padres que los niños aprendan valores y   respeto en la familia:

• Por eso hay que mantener en el hogar un ambiente de respeto e igualdad.
• Hablar entre los miembros de la familia en un ambiente relajado y de confianza.
• Valorar la importancia de las relaciones de amistad entre los compañeros de clase.
• Preguntar a los niños sobre situaciones donde tengan que solventar problemas cotidianos y ayudarles a dar respuesta.
• Tener una relación cercana y periódica con la tutora de la clase para intercambiar información sobre el niño.
• Conocer a compañeros de clase e identificar a sus amigos.
• Estar pendientes de su estado de ánimo y resistencia o no para asistir a la escuela.
• La familia ha de estar siempre informada, existen cursos donde se orienta a los padres sobre cómo detectar, trabajar y ayudar en caso de acoso.

Desde el colegio:

Suele ser el colegio el lugar principal para el bullying. Por ello los profesores:

• Siempre han de estar alerta ante cualquier signo de alarma. Los acosadores suelen ser muy discretos y no suelen hacerlo delante del profesor.
• Han de escuchar atentamente para darse cuenta de que un alumno intenta explicar el problema de bullying contra él u otra persona.
• No normalizar la conducta negativa: “son cosas de niños “, cuando nos referimos a la violencia continuada entre ellos.
• Zonificar los sitios de riesgo: siempre va a haber puntos en el colegio donde bien sea por ubicación, luz, por la ausencia de adultos…. El bullying puede hacerse presente. Estos lugares han de estar bien vigilados.
• Impartir cursos o charlas sobre el acoso escolar.
• Crear un clima de confianza en la clase entre profesores y alumnos.
• Utilizar el diálogo como la principal herramienta para atajarlo.

Bien sea, desde casa o el colegio debemos de enseñar a los niños unas bases  sólidas para erradicar el acoso escolar. Los niños tienen derecho a ser felices y nadie puede hacer de menos a nadie.

¿Qué hacemos desde la escuela infantil cuál es nuestro papel en la prevención del bullying?

En BRAINS NURSERY SCHOOL desarrollamos el Programa BNS de Educación Emocional y Valores. En el que a través de diferentes dinámicas en la escuela y actividades compartidas entre casa y escuela, desarrollamos en los pequeños una sólida autoestima. Desarrollamos también la empatía y capacidad de escucha que les ayudará en el futuro a desarrollarse entre sus iguales de forma adecuada y desde el respeto y el cariño. Con los más mayores de 4 a 6 años, las dinámicas del aula, para la resolución de conflictos cotidianos, contribuyen a fortalecer sus habilidades sociales y a “ponerse en el lugar del otro” y a recurrir al adulto o profesor como figura de mediación.